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Debería dejar de buscarle mensajes ocultos a todo lo que haces o dices.
O, quizá, simplemente debería dejar de preocuparme por dejar mensajes ocultos en cualquier esquina.
Un día cualquiera voy a terminar teniendo un problema. Alguien va a encontrar las notas que escribo en servilletas o en las paredes de los sitios a los que voy, muy pronto alguien se dará cuenta de que no es un simple nombre, que hay otro alguien detrás de él.
Gracias a Dios, no tengo por qué preocuparme: estoy casi segura de que todo lo que digo o escribo no es tomado con mucho interés; probablemente si alguien encuentra las hojas de papel que voy dejando en cualquier esquina no va a tomarse la molestia de seguirme para ir encontrando el resto de mensajes y tonterías que voy dejando caer accidentalmente allá por donde paso.
Leo tanto que mi madre se piensa que lo que escribo son fragmentos de libros que me han gustado mucho (no es que escriba bien, es que ella tampoco se digna a leerme).
Al menos sé que puedo estar tranquila, puedo dejar mensajes gritando tu nombre en cualquier sitio al que vaya: nadie va a darse cuenta, quizá ni siquiera tú te des cuenta de que estoy susurrándote tu nombre al oído.
Supongo que es entendible: yo no escribo tan bien como para que alguien me lea constantemente, tampoco soy lo suficientemente agradable para que alguien me lea sólo porque le caigo bien, ni siquiera escribo cosas con sentido o divertidas para que me lea la gente que se aburre, resumiendo: escribo sólo para mí misma, para luego poder quejarme de que la gente no me lee. Es ridículo, ¿verdad? Bueno es ridículo y también es mentira: en realidad escribo para ti, aunque no me entiendas.
O, quizá, simplemente debería dejar de preocuparme por dejar mensajes ocultos en cualquier esquina.
Un día cualquiera voy a terminar teniendo un problema. Alguien va a encontrar las notas que escribo en servilletas o en las paredes de los sitios a los que voy, muy pronto alguien se dará cuenta de que no es un simple nombre, que hay otro alguien detrás de él.
Gracias a Dios, no tengo por qué preocuparme: estoy casi segura de que todo lo que digo o escribo no es tomado con mucho interés; probablemente si alguien encuentra las hojas de papel que voy dejando en cualquier esquina no va a tomarse la molestia de seguirme para ir encontrando el resto de mensajes y tonterías que voy dejando caer accidentalmente allá por donde paso.
Leo tanto que mi madre se piensa que lo que escribo son fragmentos de libros que me han gustado mucho (no es que escriba bien, es que ella tampoco se digna a leerme).
Al menos sé que puedo estar tranquila, puedo dejar mensajes gritando tu nombre en cualquier sitio al que vaya: nadie va a darse cuenta, quizá ni siquiera tú te des cuenta de que estoy susurrándote tu nombre al oído.
Supongo que es entendible: yo no escribo tan bien como para que alguien me lea constantemente, tampoco soy lo suficientemente agradable para que alguien me lea sólo porque le caigo bien, ni siquiera escribo cosas con sentido o divertidas para que me lea la gente que se aburre, resumiendo: escribo sólo para mí misma, para luego poder quejarme de que la gente no me lee. Es ridículo, ¿verdad? Bueno es ridículo y también es mentira: en realidad escribo para ti, aunque no me entiendas.
Vale la pena leerte,
ResponderEliminarno sé si la pluma, o la tinta,
tienen mucho de corazón y de vida,
sigue dejando notas perdidas,
que se conviertan en esquinas,
que la gente doble y sorprendida,
se encuentre un armario
a una nueva vida.
Qué malos son los Lunes,
me ha encantado leerte
No sé si escribes tan bien como para leerte constantemente, pero sé que me siento tan identificada con algunas cosas que cuando no logro expresarlas por mi misma solo tengo que leerte.
ResponderEliminarLo siento Julia, en esta ocasión te equivocas en muchas de tus afirmaciones...
ResponderEliminarimpresionante.. tus eskritos me tienen en chispa
ResponderEliminarno se enkuentra a muxa gente ke se pregunte ke se able i no se mienta, por razon, o por encaje.
LA mentira es mentira.. eskribes para alguien x ti, sientes la necesidad de ser entendida,conprendida,i una d las buenas formas es x estos grandes textos kon mil i un sentimientos entre lineas, k ninguno d nosotros salvo tu puedes llegar a captarlos todos.
Aun asi, desistir es de cobardes.